Jeroglificos egipcios
Jeroglifo es un término que tiene su origen en dos palabras griegas: ἱερός (hierós) "sagrado", y γλύφειν (glýphein) "escritura". Apenas los sacerdotes, los miembros de la realeza, los altos cargos, y los escribas, conocían el arte de leer y escribir valiéndose de esas señales "sagradas".
La escritura jeroglífica constituyó, probablemente, el sistema organizado de escritura más antiguo del mundo, y era utilizada principalmente para inscripciones oficiales en las paredes de templos y túmulos. Con el tiempo evolucionó hacia formas más simples, como el hierático, una variante más cursiva que se podía pintar en papiros o placas de barro, y aún más tarde y debido a la creciente influencia griega en el Cercano Oriente, la escritura evolucionó hacia el demótico, fase en la que los jeroglíficos primigenios figuran bastante estilizados, produciéndose la inclusión de algunos signos griegos en la escritura.
Uso a lo largo del tiempo
Los jeroglíficos fueron usados durante un período de 3.500 años para escribir la antigua lengua del pueblo egipcio.
Existen inscripciones desde antes del año 3.000 a.C. hasta el 24 de Agosto de 394, fecha aparente de la última inscripción jeroglífica, en las paredes del templo de la isla de File.
Constituían una escritura monumental y religiosa, porque eran usados en las paredes de los templos, túmulos, etc. Existen pocas evidencias de otras utilizaciones.
Durante los más de tres milenios en los fueron usados, los egipcios inventaron cerca de 6.900 signos. Un texto escrito en las épocas dinásticas no contenía más de 700 signos, pero hacia el final de esta civilización ya eran usados millones de jeroglíficos, lo que complicaba mucho la lectura; siendo estos uno de los factores que tornaron impráctico su uso y llevaron a su desaparición.(Texto extraído de Wikipedia)